Cálculos en la vesícula: por qué se forman y cómo tratarlos
01 de julio del 2022
Si presentas digestiones pesadas con sensaciones de náuseas o sufres de cólicos que vienen acompañados de un dolor súbito e intenso luego de comer muchas grasas, ten cuidado. Estas son algunas señales de alerta de una condición médica muy frecuente conocida como litiasis biliar, una enfermedad caracterizada por la presencia de cálculos en la vesícula.
¿Qué son los cálculos en la vesícula?
También conocidos como cálculos biliares o piedras en la vesícula, son acumulaciones sólidas compuestas generalmente de colesterol o bilirrubina que se forman dentro de la vesícula biliar.
Estos pueden ser de diferentes tamaños, desde un grano de arena hasta una pelota de golf. Asimismo, la vesícula biliar puede formar un solo cálculo biliar grande, cientos de piedras pequeñas o una combinación de cálculos pequeños y grandes.
Síntomas de cálculos en la vesícula
Si bien algunas personas con cálculos biliares no presentan síntomas, estos pueden ser detectados en una radiografía de rutina, una cirugía abdominal u otro procedimiento médico.
En tanto, otros casos pueden llegar a obstruir conductos biliares o causar complicaciones más graves. Por lo que algunos de los síntomas que puedes presentar son:
- Dolor en la parte superior derecha del abdomen, que puede ser constante o de tipo cólico, y durar varias horas.
- Coloración amarillenta de la piel y de la esclerótica de los ojos.
- Fiebre leve o escalofríos.
- Náuseas y vómitos.
- Heces color arcilla y orina de color de té..
¿Cómo saber si tienes cálculos en la vesícula?
“Es un problema extremadamente común que se descubre por lo general cuando hacemos un chequeo de rutina. Los factores que aumentan los riesgos de padecer cálculos biliares son: ser mujer, el sobrepeso u obesidad, antecedentes familiares de malos hábitos alimenticios y la paridad (cantidad de embarazos)”, explica la doctora Lil Saavedra Tafur, especialista en cirugía general, endoscópica y bariátrica de la Clínica San Pablo Surco.
Los cálculos en la vesícula se pueden detectar gracias a la información que proporciona el paciente sobre sus síntomas, así como su historial médico. Además, el médico recurrirá a algunos tipos de exámenes por imágenes para confirmar su diagnóstico y conocer datos como la ubicación y el tamaño de las piedras en la vesícula, y su efecto en la función de los órganos.
Algunos de los exámenes utilizados en el diagnóstico son: ecografía abdominal, tomografía computarizada abdominal, ultrasonido endoscópico y gammagrafía de la vesícula biliar con radionúclidos.
¿Por qué se forman cálculos en la vesícula?
Para entender por qué se generan cálculos en la vesícula, debes saber que el hígado está constantemente produciendo un líquido llamado bilis, el cual ayuda en la digestión de los alimentos que contienen grasa a través de la eliminación de elementos tóxicos.
Precisamente, los cálculos en la vesícula se forman cuando esta bilis contiene un exceso de colesterol o de bilirrubina, o una deficiencia de sales biliares. También se conoce que los cálculos biliares pueden formarse cuando la vesícula no se vacía por completo o con suficiente frecuencia.
Asimismo, existen varios factores de riesgo que hacen a algunas personas más propensas que otras a sufrir de cálculos biliares, como por ejemplo la obesidad, diabetes y ciertos tipos de dieta.
Consecuencias de los cálculos en la vesícula
Aunque en la mayoría de los casos los cálculos no presentan síntomas, debes tener presente que si aumentan de tamaño o empiezan a obstruir las vías biliares el cuadro puede ir evolucionando hasta tener mayores complicaciones.
“Cuando se tapa el conducto de salida, se puede hinchar e inflamar la vesícula biliar. Por ello, vemos a muchas personas que llegan al servicio de emergencia con un cuadro de pus (piocolecisto que es una complicación de la colecistitis aguda litiásica)”, comenta la doctora Saavedra.
Otra complicación también se produce cuando las piedras salen de la vesícula y pueden quedarse trancadas en el conducto biliar. El paciente presenta dolor, los ojos se vuelven amarillos, la orina oscura y las heces de color pálido grisáceo debido a que la bilis no se puede eliminar y se retiene en la sangre.
Este es un cuadro serio, ya que si la bilis retenida se infecta se producirá lo que se llama colangitis, que consiste en la inflamación o infección de los conductos hepáticos y biliares.
Cabe mencionar también que “hay algunos estudios que relacionan los cálculos mayores a dos centímetros con el cáncer vesicular”.
Tratamiento de los cálculos en la vesícula
Tratar los cálculos en la vesícula podría no ser necesario cuando la persona no presenta síntomas. Sin embargo, si presentas cólicos biliares u otros síntomas relacionados, lo mejor es acudir a un gastroenterólogo que te recomendará alguno de los siguientes tratamientos:
Medicamentos
Cuando se trata de cálculos de colesterol, es posible que el tratamiento incluya medicamentos en forma de píldoras que contienen ácidos biliares para disolver los cálculos en la vesícula.
Este tratamiento normalmente se recomienda en el caso de cálculos biliares pequeños y el paciente puede tardar meses o hasta años de tratamiento para eliminar todos los cálculos. En raras ocasiones, también se introducen químicos directamente a la vesícula biliar a través de un catéter, pero los cálculos pueden reaparecer tiempo después.
Extracción de los cálculos biliares
Cuando los cálculos biliares también han causado el bloqueo de los ductos biliares, se pueden emplear otros procedimientos como una colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRE) o una colangiografía hepática percutánea (CTHP).
La primera utiliza un endoscopio que pasa por la boca y el estómago hacia adentro del duodeno, se inyecta material de contraste con yodo dentro de los ductos biliares con el fin de localizar los cálculos, los cuales pueden ser removidos durante el proceso.
Mientras que la colangiografía hepática percutánea requiere una pequeña incisión en la piel para introducir una aguja dentro de los conductos biliares. Una vez ubicados los cálculos biliares, estos pueden ser removidos durante el proceso o desviados dejando un catéter en el lugar.
Cirugía de vesícula
La operación de extracción de vesícula es una de las cirugías más comunes y en Clínica San Pablo se realiza mediante una colecistectomía laparoscópica.
“Este procedimiento tiene muchas ventajas cuando es electiva y se programa. El paciente puede operarse en la mañana y estar en su casa por la tarde. Para ello, se realizan tres pequeñas incisiones de 5 a 10 milímetros, es rápido, produce menos dolor y menos impacto estético”, resalta la especialista.
Añade que la mayor parte de las personas no padecen problemas digestivos después de una cirugía de vesícula, ya que esta no es fundamental para una digestión saludable. Asimismo, los pacientes que opten por extirpar la vesícula, pueden caminar y realizar una vida normal desde el primer día, en forma progresiva, hasta retomar sus actividades.
“Con este procedimiento totalmente ambulatorio, el paciente es dado de alta en unas horas y sin hospitalización. Una de las principales ventajas es que la recuperación se puede realizar en el hogar en un ambiente familiar con el amor y cuidado de sus seres queridos”, destacó la doctora Saavedra.
¿Cómo prevenir cálculos en la vesícula?
Los cálculos biliares no pueden prevenirse en la mayoría de los casos. Pero, sin duda, una alimentación saludable y realizar actividad física con frecuencia ayuda a mantener un peso saludable y reduce el riesgo de desarrollar cálculos en la vesícula.
Los especialistas también recomiendan comer más alimentos con alto contenido de fibra y reducir el consumo de carbohidratos refinados y azúcar. Asimismo, comer grasas saludables como el aceite de pescado y el aceite de oliva ayudan a que la vesícula biliar se contraiga y pueda vaciarse con regularidad.
Si has presentado un ataque de la vesícula biliar o algunos de los síntomas mencionados anteriormente, reserva tu cita en Clínica San Pablo con uno de nuestros especialistas en Gastroenterología o escríbenos a través de nuestro chat de WhatsApp para ayudarte en el proceso.