DISFRUTA DE LOS TERRIBLES DOS AÑOS
Cierto o no, terribles o no, hay una verdad universal sobre los dos años y es que ésta es la etapa que marca el inicio de la independencia de nuestros pequeños, notamos como pueden hacer más cosas sin nuestra ayuda y todos los días son un nuevo reto.
Por eso, y a pesar de la mala fama que tienen, te hacemos una lista de todas las cosas positivas de los “terribles” dos años, para que recuerdes que incluso las etapas más difíciles tienen sus buenos momentos.
1- Todo es un descubrimiento
En vista de que ya son capaces de caminar e ir a donde quieren por sí solos sin que tú los ayudes, todo lo que tocan y ven es una completa novedad para ellos, así que están siempre aprendiendo, experimentando y descubriendo.
2- Cada travesura es memorable
Aunque muchas de las travesuras de tu bebé conviertan la casa en un desastre, te divertirás con cada una de sus ocurrencias porque son cosas que cuando lo tenías en brazos todo el día no podías imaginarte que haría. Sin duda te arrancará más de una risa.
3- La edad del “Yo”
La independencia de tu bebé te hará escuchar muchas veces esa palabra de su boca. Se da porque rendirse no es una opción para ellos, quieren hacer las cosas por sí mismos y lo intentarán una y otra vez hasta lograrlo. Esto definitivamente te hará sentir un gran orgullo por la persistencia de tu pequeño cuando se propone hacer algo.
4- Muestran más su afecto
Esta debe ser una de las partes más lindas de esta etapa, tu pequeño comenzará a dar besos, abrazos, frases de cariño a montones y porque en serio le nacen. Estas muestras de afecto alegrarán tu día sin lugar a dudas.
5- Siempre habrá una palabra nueva
Si te emocionaste cuando bebé dijo su primera palabra, a partir de los dos años te emocionarás y sorprenderás todos los días con las palabras que irá aprendiendo tu bebé o con las frases que irá desarrollando para poder comunicarse. Eso sí, recuerda que los bebés repiten todo lo que oyen, así que cuidado con lo que dices frente él.
6- Desarrollas paciencia, mucha paciencia
Si algo que desarrolla paciencia en las personas, son los hijos. Aprenderás a respiras hondo y entenderás que a tu pequeño a la hora de hacer un berrinche no le importa ni donde está ni quien lo ve. Así que, relájate y recuerda que esta etapa también pasa.
No olvides aprovechar cada momento con tu pequeño porque ningún día a su lado es aburrido; seguro habrán berrinches y momentos de desesperación pero es el momento en que están aprendiendo a reconocer y entender sus emociones, y nadie mejor que tú para guiarlos.